martes, 12 de agosto de 2014

Nueva estación en el camino , Africa, Senegal

Hacia tierras lejanas y conectando hacia mis adentros....

Llego el momento de emprender camino hacia tierras africanas...
paso a paso las pieles van oscureciendose y las vistosas telas colorean el paisaje, por ahora me maravillo mirandolas. Y junto a estas cae la primera noche. Una noche de celebración para muchos de los que nos rodean, hoy junto con la luna nueva acaba el ramadan tras 29 ?¿ dias de ritual. Y la sonrisa se dibuja en algunos, llega el momento donde van sacando los dulces para saciar el paladar y llenar sus estomagos tras sus pregarias para el alma y largo dia de ayuno.
En las nubes fantaseo como será el camino que nos espera y recuerdo sueños de infancia donde tras los documentales de la uno, ya existia el anelo del encuentro comunal, la tribu y los rituales que la acompañaban dicha fantasia. EL fuego, la musica y la danza ...... la escena en mi imaginario. (abrillantan)
Mamadu me introduce al pais, contandome anecdotas contrastando su actual vida en Barcelona y la realidad que viven sus familiares en Senegal

Yoff, un entrañable pueblito de pescadores

Conocemos de primera piel la teranga. Es dia de festividad y las pocas posiblidades de encontrar un puestito para llenar nuestros estomagos se agotan. Hoy no se preocupan por trabajar, el focos está en engalonarse para ir esta noche a la fiesta. Solo los sastres le dan al pedal sin parar de bordar los vestidos qeu se luciran al atardecer. Y en esta busqueda de alimento aparecerá un viejo anciano invitandonosa su casa a comer. Timidos y nerviosos entramos hacia la casa y alli nos brindaran un sabroso y picante pollo con el que nos chuparemos los dedos literalmente. La familia va extendiendose hasta sumar unas 20 personas sentadas en el suelo rodeando un mismo plato. Bonita imagen gravo en mi mente.
La comida y la bebida no deja de aparecer, y vergonzosamente vamos repitiendo con la expresion de nuestros cuerpos estar repletos.
Teranga, una hospitalidad desmedida, un aprendizaje para el alma.






Tomamos barco en Dakar hacia Ziguinchor, en Casamance, huyendo de la contaminacion y agetreo de esta gran ciudad tras conocer algunas de sus calles, gentes y mercados. El abarrotado mercado de HLM me atrapa largas horas en mi operación de busqueda de sastre para mi vestido senegales. Las señoras empujando en busca de sus atuendos, todas ellas se engalanan con uñas y pestañas postizas, tatuajes de henna y elaborados peinados.
A mi los ojos me hacen chiribitas, los puestos estan repletos y llenos de color, és el paraiso de las telassssss.... , pelucas, sastres por todas partes, comida, zapatos, musica y gritos de sus vendedores, retratan el dia antes de la gran fiestaA.
Esta no va a ser mi oportunidad de hacerme el vestido, los sastres apenas respiran para acabar sus pedidos.


En Ziquinchor nos tomamos dia de relax, la estacion lluviosa nos muestra sus caracteristicas parandose la actividad. Hoy deleitara nuestros paladares el primer pescado senegalés y aunque las condiciones metereologicas no acompañan la velada, nuestras barrigas acaban contentas.
Pasamos tarde de gestiones para mañana emprender camino hacia nuestra nuestro nuevo objetivo, conocer la medicina tradicional del Marabu Sonko. EL primer paso será llegar a Kafontine y alli conocer a un hombre que nos llevara a un remoto lugar donde nos espera un viaje de sanación.






sábado, 22 de septiembre de 2012

festival de teatro por la paz, barrancabermeja




Barrancabermeja...
250 hectareas colonizadas por el trabajo del petroleo

horrible paisaje de rio negro
donde en la actualidad fuegos encienden la ciudad dia y noche

en su historia, una ciudad altamente masacrada por el conflicto armado


ahora es el petroleo el que agrede el lugar, pero el medio por el cual he llegado aqui, es ese maldito crudo


un festival por al PAZ, una gran palabra cuando a momentos es dificil sostener cada una de sus letras
una iniciativa linda, pero llena de contradicciones y microviolencias a revisar, pero una bonita puerta para mi...para seguir creando y construyendo...

agradecida y plenamente acompañada por las gentes que encontré en esa calurosa y ruidosa ciudad.
gracias por sus abrazos...

cursos, tallers, propostes artistiques, espais d'expressio i d'experimentació...

...de retorno al ritmo de ciudad pero con pequeños pulmones de vida, medellin

Centro cultural de la Red Juvenil, proyecto antimilitarista y feminista.




maravillosos montes que circumben la ciudad de Medellin, conocidos como la suiza colombiana

jueves, 13 de septiembre de 2012

maravillada por un desierto bien lejano



Viaje pesado y largo, una manita cariñosamente me despierta y me dice :<<eva, llegamos a RIoacha>>
Abrí los ojos y parecia haber cambiado de país. LOs rostos eran de indios de fez oscura, miradas duras, las mujeres vestian largas tunicas, hacia un calor terrible y todo corría muy rápido. Siete hombres se abalancharon sobre nosotras para ofrecerse para llevarnos a nuestro destino, pero apenas nos dejaban respirar.
EL lugar era un estraño paisaje entre una pelicula de Far West y un desierto surafricano.
Y UN hombre nos acerco a Cabo de la VEla, el lugar donde vana  reposar todas las almas de los wayus. DE camiono el hiombre nos contó sobre su etnia, los Wayus, son los indígenas que habitan el lugar.
YO deseaba conocer sobre tnias indigenas e incluso soñaba en algun momento vivir un tiempo en algun lugar para conocer mejor sus costumbres y ritos, pero ahora mismo se me estremec el estomago al oir algunos relatos sobre las mujeres del lugar. Cuesta no ponerse esas gafas de genero y tratar de comprender sus costumbres, pero para mi, priorizan unos derechos humanos, pero trato de limitarme a escuchar sin juicio. POr un momento me senti afortunada de haber nacido donde nací, lugar donde nos quedan muchas luchas como mujeres por delante pero que ya hay un camino recorrido, y mucho otro por recorrer.
El lugar... mágico, calmo pero imponente...arena, sol y agua, y poco mas que sus gentes y cabañas de cactus. algunos tejen redes para pescar, otras tejen morrales para sus paisanos y para vender.
Aquí la gozo durante días, ranchando en la hamaca, bañando mi cuerpo en estas aguas calientes, largas caminatas bajo ese imponente sol y compartiendo lindas compañías que me regalo el lugar.

la guajira